Un encuentro que confirma que las relaciones internacionales de
Argentina serán uno de los temas clave para el próximo gobierno, que
asumirá el 10 de diciembre de 2023.
Dependiendo de quién resulte ganador el19 de noviembre en la segunda
vuelta de los comicios presidenciales, el rol de Argentina y su
inserción en el mundo podría cambiar en diversos aspectos. Estos son los
más importantes.
Incorporación de Argentina a los BRICS
Argentina está invitada a formar parte de los países BRICS (Brasil,
Rusia, India, China y Sudáfrica) a partir del 1 de enero de 2024. "Un
panorama posible es la aceptación de la invitación, si gana Massa, y lo
contrario si gana Milei”, dice a DW Gabriel Puricceli, sociólogo y
analista del Laboratorio de Políticas Públicas.
"De eso no quedan dudas. Ya antes de las elecciones, la derecha de La
Libertad Avanza y la de Juntos por el Cambio había dejado en claro que
no aceptarían la invitación”. En cambio, según las definiciones de
política exterior del equipo de Unión por la Patria, el partido de
Massa, "en la escena internacional, los BRICS son el foro privilegiado
para expresar los intereses del sur global”, añade Puricelli.
Para Leandro Morgenfeld, analista internacional e investigador del
CONICET, si ganara el libertario de ultraderecha se desataría un duro
debate, porque "Milei dijo que Argentina no tiene que participar de ese
bloque, que hay países comunistas y que eso no va a ocurrir con su
gobierno”.
"Sería un enorme despropósito que Argentina, que es parte del G-20
hace algunos años, no integre el grupo BRICS, con países que están
disputando esa polaridad encabezada por Estados Unidos, con gobiernos
muy distintos que están planteando una redistribución del poder a nivel
mundial”, sostiene el docente de la Universidad de Buenos Aires. "Hoy en
día, la relación comercial de Argentina con los países del BRICS es
mucho más importante que la que tiene con Estados Unidos o con la Unión
Europea”, asegura.
Argentina como miembro del Mercosur y el tratado con la UE
"La visión de Milei es que el Mercosur no sirve. Según él, Argentina
debería directamente abandonar el bloque”, dice Morgenfeld. Como
contracara, "es muy clara la definición de la campaña de Massa de hacer
del Mercosur un aspecto central y estructurante de la política exterior
argentina. La idea es hacerse fuerte en las asociaciones regionales para
proyectar con más vigor la voz argentina y de la región en el mundo, un
concepto que la campaña de Massa ha planteado con mucha claridad”,
explica, por su parte, Puricceli.
"Menos claro es qué posición va a adoptar Argentina, si ganara el
candidato peronista, frente a las demandas, por ejemplo, de Uruguay, de
flexibilizar los términos que les permiten a miembros individuales del
bloque negociar tratados de libre comercio con actores extra regionales,
la discusión abierta respecto de disminuir el arancel externo común del
bloque”, añade.
"Se entiende que Massa va a potenciar al Mercosur, a relanzarlo en
algún sentido, y va a rediscutir los términos -como también está
planteado en Brasil- del acuerdo Mercosur-Unión Europea, que es un
acuerdo muy lesivo para los intereses industrialistas de los países que
integran el Mercosur”, advierte Morgenfeld.
En cuanto a la postura del partido de Javier Milei, "ahí ya entramos
en un terreno más complicado, porque no le ha prestado demasiado
atención al Mercosur como tal, sino que cuando ha hecho declaraciones de
política exterior que involucran a la región, han sido más bien para
definir claramente quiénes no van a ser amigos de Argentina”, señala
Puricceli.
Javier Milei dijo en varias oportunidades que a su partido no le
interesa tener relaciones con China, por ser un país comunista, ni con
el Gobierno de Lula en Brasil, por la misma razón, llegando a asegurar
que iba a romper relaciones con estos dos países. A Morgenfeld, esto le
parece "absurdo", no solo porque "son los dos principales socios
comerciales de la Argentina, sino que ningún país en ningún lugar del
mundo deja de tener relaciones con países que tienen gobiernos de otro
signo político”, critica.
"Eso, más allá de la barrabasada de caratular al Gobierno de Brasil
como un Gobierno comunista”, agrega Morgenfeld, quien advierte
que romper relaciones con esos dos países y no sostener relaciones
internacionales con otros "es absolutamente inviable en una Argentina
hoy carente de dólares y de divisas en general”. Y Argentina depende en
gran medida del financiamiento y las inversiones de China, indica.
El rol de Argentina en el escenario internacional
"El anuncio causó mucha preocupación en Brasil y, si Milei rompiera
realmente las relaciones con ese país, eso sería una hecatombe”,
prosigue Morgenfeld. Al decir que sus dos principales socios son Estados
Unidos e Israel, el candidato libertario "plantea un esquema
unilateral, o sea, no solo unipolar, sino que también -a diferencia de
otros de lo que pudo haber sido el macrismo u otros gobiernos de
características neoliberales en América Latina- resalta el desprecio por
todos los organismos multilaterales”.
"Durante su campaña, Massa planteó con mucha claridad un principio de
política exterior, el principio de ser amigos de todo, pero vasallos de
nadie”, recuerda, por su parte, el analista Puricceli. "En ese sentido,
habría más bien una continuidad de la política exterior actual y una
continuidad también de la política de largo plazo de la Argentina”,
explica.
"(Massa) puso énfasis en una inserción internacional más pragmática,
que tenga que ver con ampliar las exportaciones, con aumentar las
inversiones en sectores que tienen que ver con los recursos estratégicos
de la Argentina, es decir, en tratar de equilibrar la balanza de
pagos”, destaca Morgenfeld.
Finalmente, el pago de la deuda al Fondo Monetario Internacional, que
seguirá ocupando al próximo gobierno, también fue abordado por el
candidato de Unión por la Patria: "Massa diversificó el financiamiento
externo”, apunta el investigador Morgenfeld. "Pero, más allá de seguir
negociando con el FMI y no plantear una ruptura, también abrió una vía
hacia el financiamiento chino”.