Actividad presidencial en EEUU

Cristina parte hacia EE.UU. para hablar en la ONU y en Harvard

Por Natasha Niebieskikwiat (Clarín)

Llegará mañana a Nueva York y tendrá dos días sin actividad. En las Naciones Unidas, volverá a reclamar por Malvinas y por el caso AMIA, en el que está implicado Irán. Y dialogará con alumnos de la prestigiosa universidad.

El viaje que inicia esta noche Cristina Kirchner a Nueva York, donde el martes dará su mensaje en la Asamblea General de las Naciones Unidas, refleja en buena parte el ánimo de la mandataria. Redujo sus actividades a la mínima expresión, como también la nutrida comitiva que la acompañaba estando en vida Néstor Kirchner. Además, decide cada detalle con su pequeño círculo de confianza, sin bajar la información ni a sus ministros.

Contando las presentaciones que hará en las universidades de Georgetown (en Washington) y Harvard (en Boston), permanecerá casi una semana en los Estados Unidos. En el primero de esos establecimientos inaugurará la Cátedra Argentina y al día siguiente se topará con las preguntas de los alumnos de Harvard, con fama de “bravos” . El viernes próximo volverá al país y embarcará el lunes a Lima, para la cumbre de Países Arabes y América Latina.

Antes de enviarlo a reparación, CristiHabalrána volverá a viajar hoy en el Tango 01 ( ver “Puja entre...” ) con el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini. También la acompañarán el canciller Héctor Timerman, y la sorpresivamente designada representante ante la ONU, Marita Perceval.

Con un Estados Unidos concentrado en la campaña presidencial, y un vínculo aún zizagueante, el Gobierno se concentró en el “lobby” del embajador Jorge Argüello en las recientes convenciones republicana (Tampa) y demócrata (Charlotte). Pero Cristina no tendrá encuentros oficiales con políticos estadounidenses, y aún no confiesa si estará en la cena que el lunes ofrecerá Barack Obama a los mandatarios que participarán de la 67° Asamblea de la ONU. De hecho, en la agenda de Cristina no hay actividad prevista para mañana, ni confirmada para el lunes, por lo que podría llegar a tener 48 horas libres en Nueva York, una de sus ciudadades favoritas.

En la Rosada dan por seguro que entre el martes y el jueves el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon, recibirá a Cristina, quien se aguarda que vuelva a mencionar la cuestión Malvinas . Un tema que también abordará ante la Asamblea, junto a la vinculación de Irán con el caso AMIA y las propuestas para reformar los organismos de la ONU.

El panorama empresario también es discreto. El Gobierno no salió satisfecho de la última reunión que mantuvo Cristina con empresarios en Nueva York, cuando viajó para dar un discurso ante el Comité de Descolonización de la ONU y aún YPF estaba en proceso de expropiación. A Cristina ahora le están armando una cita –sin confirmar– con el presidente de la Exxon, Rex Tillerson. También el número uno de YPF, Miguel Gallucio arribará a Nueva York, para hablar el viernes ante el Consejo de las Américas, adonde Cristina tampoco participa este año.

Desde que falleció Kirchner, la Presidenta cambió el hotel Hyatt por Mandarín, que tiene una imponente vista al Central Park. De Timerman dependerán las entrevistas bilaterales que con sus colega podría mantener Cristina.

Ayer en el Gobierno estaban dando marcha atrás con el pedido de entrevista que el canciller iraní, Alí Akbar Salehi, le hizo a su par argentino, que en un principio lo ilusionaba . La presión de las principales instituciones judías, esta vez no invitadas , mellaron lo que en principio anunciaron inusualmente como prácticamente un hecho. Timerman tiene bilaterales con sus pares de Israel, Rusia, Italia, Argelia, Holanda, Pakistán, Portugal, Sierra Leona y Eslovenia. Embarcado en viajes por Asia y América Latina, Timerman ya está en Nueva York donde tiene la misión de buscar adhesiones para la votación de octubre , en la que Argentina debería ser electa para una banca no permanente ante el Consejo de de Seguridad, que amenaza ser esta vez más baja –aunque está asegurada igual– que la que obtuvo el país en 2004 para el período 2005-2006.