EL PAIS › ARGENTINA OCUPARA EL AñO PROXIMO UN LUGAR EN EL CONSEJO DE SEGURIDAD DE LAS NACIONES UNIDAS
Un asiento en la mesa más importante
Argentina fue elegida por unanimidad por los países
de América latina y el Caribe para ocupar el lugar como miembro no
permanente que le corresponde a la región durante el año próximo.
Consideran que el reclamo por Malvinas pesó en la decisión.
Por Nicolás Lantos (Página/12)
La
Argentina ocupará un asiento en el Consejo de Seguridad de las Naciones
Unidas: mientras que algunos sectores de la oposición política y
mediática vienen machacando hace años con el supuesto “aislamiento
internacional” al que se encontraría condenado el país, la Cancillería
anunció ayer el apoyo unánime de los gobiernos de América latina y el
Caribe para que sea el único candidato a ocupar la banca como miembro no
permanente que le corresponde a la región durante el bienio 2013-2014.
La elección será refrendada en octubre, en el marco de la 67ª asamblea
general de ese organismo, y el mandato comenzará a partir del primer día
del año que viene. “Todos los miembros de las Naciones Unidas pueden
confiar en que la defensa de la paz, la seguridad, la soberanía y el fin
del colonialismo contarán con un país, Argentina, que será un defensor
incansable de los valores fundantes de la organización multilateral”,
señala el comunicado en el que se trasluce un tema que seguramente pesó
en la decisión y que ocupará buena parte de la agenda multilateral del
país durante su estadía en ese órgano: el reclamo por la situación de
las islas Malvinas.
“La República Argentina se compromete a representar en el Consejo de
Seguridad todos los temas relevantes a la región y su voz será la voz
de los pueblos hermanos”, aseguró el Gobierno al dar a conocer la
noticia. “La presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el pueblo
argentino agradecen a todos los países de América latina y el Caribe por
este reconocimiento”, agrega la nota. Este viernes, el canciller Héctor
Timerman viajará a Nueva York con el fin de reunirse en la sede de
Naciones Unidas con todos los embajadores de América latina y el Caribe
para “agradecerles el reconocimiento” y comenzar a trabajar en la agenda
de temas a plantear en el Consejo de Seguridad una vez que el país
asuma su lugar.
De todas formas, el mensaje que dio la Presidenta ante la Asamblea
General, en septiembre del año pasado, dejó algunas puntas de las que se
puede tirar para anticipar los ejes de la postura argentina en el
Consejo de Seguridad. En esa ocasión, CFK reclamó “democratizar los
organismos políticos” de las Naciones Unidas, ya que la actual
estructura de ese organismo fue diseñada pensando en las necesidades de
un mundo bipolar que ya no funciona de esa forma.
Mientras que muchos países proponen ampliar la cantidad de miembros
permanentes en ese órgano (que son Estados Unidos, Inglaterra, Francia,
China y Rusia; los vencedores de la Segunda Guerra Mundial), la
Argentina aboga por la eliminación de esa categoría. También propone
desterrar el derecho a veto que ostentan esos países ya que, advirtió,
“no es utilizado para defender la estabilidad universal sino muchas
veces para posicionamientos de los miembros que los integran y que hacen
ejercer su derecho ante el resto de las naciones.”
El Consejo de Seguridad, en la práctica el más relevante de los
órganos de la ONU, está conformado por 15 bancas, cinco de las cuales
corresponden a los miembros permanentes. Los diez restantes cumplen
mandatos bienales y se van reemplazando de a mitades todos los años:
Azerbaiyán, Guatemala, Marruecos, Pakistán y Togo asumieron a comienzos
de 2012, mientras que Alemania, Colombia, India, Portugal y Sudáfrica
concluyen su representación en diciembre. Argentina reemplazará a
Colombia y de esta forma ocupará por novena vez en la historia este
lugar: la última había sido entre 2005 y 2006.
La cuestión Malvinas “tuvo peso en la decisión de los países de la
región en favor de Argentina y, por descontado, tendrá un rol
privilegiado en la agenda que lleve durante su mandato”, confiaron a
Página/12 fuentes de Cancillería. En el mismo sentido se manifestó el
presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, el
kirchnerista Daniel Filmus. “En este momento particular, en que se
cumplen treinta años de la guerra de Malvinas, tiene un significado
especial esta representación que vuelve a asumir Argentina”, aseguró
Filmus, para quien este nuevo rol “seguramente va a contribuir a poner
más en la escena internacional la cuestión Malvinas”. El senador también
agregó que “el principal tema” que tendrá la Argentina ante el Consejo
“es representar los intereses de la región en torno de la paz y la
convivencia de todos los países”, poniendo como ejemplo el equilibrio
conseguido en la región. También destacó la necesidad de democratizar el
órgano. Argentina “tiene una posición sostenida respecto de que todos
los países de las Naciones Unidas tienen que respetar las decisiones de
ese organismo –insistió–. No puede ser que haya países que reciben
sanciones por no respetar decisiones de la ONU y otros que, por tener
derecho a veto, no son sancionados frente al desconocimiento de sus
resoluciones”.
Muy interesante el blog, una verdadera fuente de consulta!
ResponderEliminarSaludos
Javier