martes, 15 de noviembre de 2011

EEUU presiona a Argentina para cobrar deudas


Son cada vez más explícitas las presiones externas e internas para que Argentina vuelva a los mercados de capitales (a tomar deuda) y para que atraiga inversiones extranjeras.
Hoy La Nación publica una nota, "Tiempo de recuperar el terreno perdido", de Alejandro Díaz, CEO de AmCham, la Cámara de Comercio de los EEUU en Argentina, en la cual se critica la falta de "seguridad jurídica" en nuestro país, y la necesidad de aprovechar el acercamiento entre CFK y Obama para que Argentina se reinserte en el sistema financiero internacional e incentive la llegada de inversiones extranjeras, en particular estadounidenses.
En tapa de La Nación, hoy se publica la nota "Obama instó a la Argentina a que pague sus deudas", de Silvia Pisani, en la cual se señala, citando a Roberta Jackson -nueva subsecretaria de asuntos hemisféricos-, que en el encuentro presidencial del viernes 4 de noviembre, la Casa Blanca instó a Argentina a pagar sus deudas pendientes con los acreedores internacionales. También se da cuenta en este artículo de las nuevas amenazas de sanciones comerciales contra nuestro país por no pagar a las empresas estadounidenses que apelaron al CIADI (Azurix y Blueridge). En concreto, se plantea la posibilidad de que la Argentina sea removida del sistema de preferencias arancelarias.
Como ya lo revelamos anteriormente, esta presión externa e interna es parte de una táctica para que la Argentina vuelva a endeudarse, pague a sus acreedores externos, acepte los fallos del CIADI, arregle con el Club de París y acepte el monitorio del FMI, como contracara de un ajuste interno. Una visión que alarma ante la posibilidad de que se concrete esta tendencia, incluso desde un aliado del gobierno, puede leerse en "Con los Estados Unidos, lo cortés no quita lo valiente", de Carlos Raimundi, en Tiempo Argentino de ayer.

Diversos sectores internos, incluidos algunos de los grandes medios de prensa, insisten casi cotidianamente para que Argentina se alinee con Estados Unidos, abandonando o morigerando la línea más latinoamericanista que se desplegó, en parte, en los últimos años.

No hay comentarios:

Publicar un comentario